Sergio Massa marcó la diferencia con el PRO y rechazó su proyecto para permitir que los derrotados en las primarias puedan integrar luego una fórmula presidencial, un cambio que le abriría el juego para hacer alianzas.
“No me parece bien querer modificar las Paso en función de sus intereses. La duración en el tiempo de las leyes hacen a la salud institucional de nuestro país”, señaló Joaquín de la Torre, intendente de San Miguel y de los más cercanos a Massa.
De hecho, La Torre acompaña a Massa en su visita a San Pablo donde esta noche se reunieron con el ex presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso.
El rechazo expresado por el intendente de San Miguel marca una definición de fondo en la estrategia de Massa para el 2015, al entornar la puerta para eventuales alianzas con la UCR o el propio Macri.
El macrismo presentará la semana próxima el proyecto -anticipado por LPO- y espera la reacción de otros bloques. "Hoy tenés una competencia entre partidos o entre un mismo partido. Entonces, si las fórmulas son verticales no tenés capacidad de composición de fórmulas entre distintos actores", simplificó Patricia Bullrich.
La posibilidad de incluir a un derrotado en la fórmula potenciaría la creación de alianzas electorales y es ese el juego que quiere abrir el PRO, interesado en liderar un frente con la UCR.
Esta semana tuvo señales positivas: el lunes se reunió con Ramón Mestre, intendente de Córdoba, donde Macri tiene lo propio con Héctor Baldassi y conserva un vínculo con el diputado radical Oscar Aguad.
Aguad reporta a Julio Cobos, quien con una intención de voto cercana a los 10 puntos no consigue juego político en la UCR y mucho menos en el frente Unen, junto a socialistas y Elisa Carrió.
En el PRO ven con buenos ojos una alianza con Cobos: de ganar, para las generales Macri arrastraría a varios líderes provinciales aunque debería conciliarlos con sus nacientes referentes en el interior del país.
Rápido de reflejos, Ernesto Sanz apoyó la iniciativa del macrismo, sólo que, muy abajo en las encuestas, quiere que el vice sea elegido por el ganador.
"Yo estoy de acuerdo porque el sistema argentino es el más rígido y el mejor es el uruguayo que es el semiflexible que permite elegir al vice de entre los participantes de la interna", dijo el titular de la UCR para quien, a diferencia de los socialistas, Macri no es un límite.
Massa quiere ir solo
Con la declaración de De la Torre, Massa confirmó que no está interesado en competir en una alianza y será candidato del Frente Renovador, seguramente sin rivales en las primarias.
Esto le permitiría manejar las reglas de juego de la interna, tanto para elegir candidatos como para definir un sistema de reparto de cargos, que se definen en acuerdos entre las fuerzas que compiten en cada alianza.
Massa sumó intendentes en varios partes del país pero no cerró ni un solo gobernador y, al día de hoy, no muestra peso territorial en las principales provincias, en lo que aparece como la principal dificultad en su proyección hacia el 2015, así como algunas cuestiones de discurso o posicionamiento.
Sin embargo, a diferencia de Macri, cerró la puerta a suplir ese déficit con la UCR con un acuerdo de cúpula y sólo está dispuesto a recibir en el Frente Renovador a sus dirigentes más taquilleros.
Un cambio en la ley electoral necesita una mayoría calificada, o sea, 129 votos sin importar cuantas bancas estén ocupadas. Sólo un apoyo del oficialismo lo haría posible.
Ayer Carlos Kunkel lo descartó pero no negó que en el Congreso del PJ del 9 de mayo lo trate como opción.
En el kirchnerismo dicen que los gobernadores no quieren saber nada con este cambio, temerosos de que ante más apuestas presidenciales también se multipliquen sus rivales internos. Pero es un debate que nunca empezó.
Agustín Rossi ya anunció que en el Congreso partidario pedirá cambiar el sistema de internas para que las listas se armen por sistema D'Hont, que le da más chances de colar legisladores a las minorías, como podría ser el año próximo el núcleo duro del kirchnerismo.
"Lo voy a plantear porque creo que no es justo el sistema de mayoría y minoría, es profundamente antidemocrático y creo que es lo más razonable", anticipó.
Históricamente el D'Hont fue utilizado en la interna radical y el PJ se manejó con mayorías y minorías, que sólo habilitan a colocar un candidato cada cuatro a quien obtenga el 25% de los votos.