ARGENTINA VS. URUGUAY

Las trabas argentinas a los puertos uruguayos también alcanzarán a Nueva Palmira, cuyos operadores verán incrementados sus costos al ver reducida la cantidad de barcazas que pueden transportar en los convoyes que viajan desde Paraguay cargados de soja. 

El transporte de granos que proviene de ese país baja por el río Paraná hasta llegar al puerto palmirense, y se suele realizar en convoyes de 16 barcazas. De acuerdo a los operadores, ahora se prohibirá que se transite con más de ocho barcazas de carga al sur del puerto Campana y deberán desarmarse en alguna terminal argentina, según una disposición de Prefectura argentina. La medida afectará solo a Nueva Palmira, que este año recibió seis millones de toneladas de soja. 

El gerente de la terminal multipropósito Ontur, Raúl Souza, dijo aEl Observador que  si se reciben menos toneladas habrá “más cargo de transporte”. En los hechos, los costos se duplicarán si se pasa de 16 a ocho barcazas por cada convoy. “Nueva Palmira perderá, se encarecerá y perderá competitividad; se trata de una restricción muy fuerte”, señaló. 

Agregó que en los últimos años ya se han agregado mayores controles e inspecciones por parte de Argentina, y que esto atenta contra el tratado de libre tránsito del Mercosur y contra la hidrovía, donde Nueva Palmira es el puerto natural para canalizar cargas de la región. “La hidrovía está muy bien pensada, la gente que tuvo la visión la tenía muy clara. Pero la puesta en práctica es otra cosa”, sostuvo Souza.

El capitán del puerto de Nueva Palmira, Álvaro Llanes, prefirió no opinar y dejar que el gobierno uruguayo solucione el asunto. En este sentido, integrantes de cancillería se reunieron ayer con el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz, para continuar analizando la medida argentina que comienza a aplicarse hoy. 

Díaz comentó a El Observador que la resolución del tema pasa ahora por el ministerio de Relaciones Exteriores. “El tema en sí de las medidas de Argentina los trata directamente la cancillería. Nosotros seguimos aportando con datos y evaluando”, aseveró el titular de la ANP. La semana próxima habrá una reunión del grupo de transporte del Mercosur, en el que Uruguay buscará la manera de llevar la discusión a nivel de cancilleres y ministros. 

La semana pasada el gobierno argentino decretó que los barcos con carga de exportación de ese país solo podrán hacer transbordos con países del Mercosur con los que tengan convenios marítimos, algo que Argentina no tiene con Uruguay. La medida le haría perder US$ 80 millones anuales al puerto de Montevideo. 

El presidente José Mujica indicó ayer que hablará sobre este asunto con la presidenta brasileña Dilma Rousseff, a la que visitará mañana en Brasilia para luego seguir rumbo a Venezuela. Para el mandatario será clave que la presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner se recupere de una cirugía para empezar a encontrar un camino de solución. “Esperemos que la señora presidenta de los argentinos se cure”, dijo. “Vamos a hacer todo lo que podamos a favor de Uruguay”. 

Los exportadores argentinos, en dos comunicados, manifestaron su fuerte rechazo a la disposición de su gobierno al decir que se trazó de manera “intempestiva”, que eleva los costos de los movimientos y que traba exportaciones ya estipuladas. El diario La Nación indicó, con base en fuentes navieras argentinas, que contrariamente a lo que pretende el gobierno de Fernández de Kirchner –fomentar el desarrollo del puerto de Buenos Aires– sucederá que los transbordos de las navieras internacionales que levantan carga en los puertos del Paraná o de la Patagonia se realizarán en terminales de Brasil. 

Los medios argentinos han visto en esta movida una revancha al hecho de que Uruguay habilitó el incremento de producción –sin previa consulta– de la planta de celulosa UPM instalada en Fray Bentos.