28/10 – 10:35 – El periodista contó su reunión con Berni. Y dijo que el motochorro que lo asaltó, ya está liberado.
Y allí, se refirió al extraño asalto que sufrió la semana anterior y el detalle de una camioneta roja que lo siguió, antes de ese incidente en el Barrio Parque de la Ciudad de Buenos Aires.
“Nunca me gusta hablar de mi. Pero siendo que el episodio ha ocurrido contra mi voluntad, tengo que hacer una aclaración sobre el tema”, comenzó el conductor de “Cada mañana” por Radio Mitre, emisora que sufrió también un intento de “copamiento,. en el contexto bien delicado que hay en la Argentina con los medios de comunicación”, según manifestó el periodista.
Y volvió al asalto: “Trato de ocuparme del asunto con la máxima objetividad posible siendo que el contexto del asunto condiciona mucho el análisis. Los hechos ocurrieron el 8 de octubre pasado a la una del mediodía casi en la puerta de la casa de Jorge Fontevechia. Yo estaba caminando cuando los clásicos motochorros, un tipo con violencia me ataca y me roba el reloj; iba caminando por la calle Ombú, donde no había nadie, rodeado de policías. ‘Hasta ahí un asalto más, de los tantos que ocurren en la Ciudad de Buenos Aires”.
Y narró que “volví al lugar de los hechos dos días después y vino a saludarme uno de los policías de la garita que está donde yo dejé el auto. Me dijo que me vio y que le avisó al otro muchacho que me había visto caminando”.
Y sumó que días después, Sergio Berni “tuvo la gentileza de invitarme a su oficina. Berni es una persona con la que he tenido discrepancias públicas, pero debo reconocer que es una persona muy amable, un tipo muy educado, una persona muy atenta. Esa mañana antes de mi reunión con el señor Berni, el fiscal del asunto Luis López, le comunica a mi abogado que además hay una camioneta que lo seguía a Longobardi. Los abogados me comunican este dato. Entonces fui a la reunión con Berni sabiendo que había algo más”.
Allí, Berni “me muestra una secuencia de un video donde se ve mi auto doblando por una calle en Barrio Parque que choca con la calle Ombú, Eduardo Costa. Me dice ‘¿ves que no te sigue ninguna moto?’. Al minuto aparece no una moto sino una camioneta Ford Ranger roja siguiéndome por esa calle hasta que paro el auto. Cuando paro el auto aprovecho para hacer unos llamados. Se ve detrás de mi auto la camioneta parada atrás mío”.
Luego, Longobardi contó que fue a un local de cafetería a en Quintana y Montevideo a comprar café. Y que según le mostró Berni, “en una cámara del interior de Nespresso donde yo estoy comprando se ve afuera a la camioneta Ford Ranger Rojo. Esto no es todo. Yo había estado tomando café con dos amigos en el Hotel Hyatt. Aparecía la camioneta en la puerta del hotel”.
“El señor Berni me informó además que la moto había sido identificada. La moto pertenece a un preso. Fueron a chequear y el tipo estaba preso. La persona que me roba es identificada por las cámaras y saben quién es. Y ayer a ese señor, la justicia le otorgó la eximición de prisión, antes de ser detenido”.
“Yo le pregunté a Sergio Berni qué opinaba de este episodio. Me dijo “es raro”. Mi último contacto con Sergio Berni fue el día 20 de octubre, que le escribí para preguntarle si había alguna novedad, y no obtuve hasta el momento ninguna respuesta. Ni pretendo obtenerla. No quiero perturbar el tiempo y los recursos del estado y del señor Berni que me imagino tendrá que investigar”, detalló el periodista.
Longobardi dijo que comunicó todo esto a las autoridades de Radio Mitre, a mis compañeros del programa, a Jorge Lanata, al gobernador Daniel Scioli y al jefe de Gobierno, Mauricio Macri, quien lo derivó al jefe de Seguridad Guillermo Montenegro, el que le dijo que parece un intento de secuestro.
“Si uno pone el tema fuera de contexto, yo pude ser víctima de un robo ciertamente muy sofisticado.. pero cuando uno pone este problema en contexto, tenemos un robo con una camioneta que me sigue por la ciudad de Buenos Aires. Ocurrió un episodio parecido con el abogado Sáenz Valiente, abogado del grupo Clarín en la puerta del diario; el robo ocurrió justo el día en que el Gobierno resuelve no aceptar la adecuación voluntaria de Clarín a la Ley de Medios, ocurre en la puerta de la casa de uno de los tipos más importantes del país en materia periodística como es Fontevecchia, ocurre en las narices de la Policía Federal Argentina, y ocurre conmigo que no soy una persona simpática para gran parte de la República Argentina”, indicó el periodista.
‘Efectivamente los tipos son motochorros. Están libres. Berni tiene razón cuando subraya la laxitud de la justicia. En este caso antes de detenerlo y de tomarle la declaración, ya está excarcelado”, aseveró Longobardi quien finalizó : “La idea de que uno es seguido por una camioneta Ford Ranger roja con vidrios polarizados por la ciudad de Buenos Aires es algo inquietante”, dijo el conductor de Radio Mitre. (Clarín)
