El vicepresidente de Argentina, Amado Boudou, acusado de corrupción, ratificó hoy su inocencia luego de declarar siete horas ante el juez del caso, en uno de los mayores escándalos del gobierno de la presidenta Cristina Fernández.
“Pude exponer todos y cada uno de los puntos”, afirmó Boudou al salir de los tribunales y anunciar que colgaría en la red social Facebook de manera íntegra su declaración, para que no sea tergiversada por los medios opositores de este país.
“Así ustedes pueden ver todo sin mediación y bajarla, está toda la declaración, lo que sucedió hoy tiene que ver con el análisis técnico jurídico de la causa. Las cuestiones políticas son para otra ocasión, porque voy a ampliar la declaración”, reveló.
Boudou llegó poco antes de las 11:00 horas a los tribunales ubicados en el puerto de Buenos Aires, y fue acompañado por los aplausos de centenares de militantes oficialistas que lo ovacionaron, a diferencia de una mujer que le gritó “¡ladrón!”.
El vicepresidente había exigido que la declaración fuera televisada, pero el juez rechazó su pedido, así como la anulación de dos testimonios que Boudou había impugnado.
Boudou declaró ante el juez Ariel Lijo, quien investiga los cargos de apropiación, mediante amigos empresarios, de la imprenta Ciccone Calcográfica, que se dedica a fabricar papel moneda, para que esta firma hiciera negocios con el gobierno del cual forma parte.
De acuerdo con el citatorio judicial, el vicepresidente aprovechó su cargo como ministro de Economía para ordenar el rescate financiero de Ciccone mediante facilidades para el pago de deudas impositivas.
Según la acusación, Boudou se quedó con 70 por ciento de las acciones y logró que la firma obtuviera contratos millonarios para imprimir billetes y boletas electorales del oficialista Frente para la Victoria.
Hasta ahora, el delito que se achaca a Boudou es el de “negociaciones incompatibles con su función”, aunque la carátula del caso puede cambiar a algo más grave como “cohecho”, en cuyo caso avanzará la presión opositora para que un juicio político lo destituya.
Este es uno de los mayores escándalos vinculados a la corrupción durante el gobierno de Cristina Fernández, quien se ha negado a hablar del caso, en tanto que varios de sus funcionarios han reivindicado el derecho de defensa del vicemandatario.
