El empresario cordobés Héctor Rolotti, dueño de Novecento, que era buscado en la India apareció muerto anoche, según confirmaron desde la agencia cordobesa Latin ADV, que centraliza la comunicación de la firma, aLa Voz.
El cuerpo de Rolotti fue hallado a metros de donde había sido visto con vida por última vez, cuando se había sumergido al río Ganges para socorrer a una compañera de viaje que era arrastrada por la corriente de ese río caudaloso.
Novecento Group precisó a través de un comunicado que "luego de seis días de búsqueda intensa en el Tío Ganges, finalmente encuentran su cuerpo sin vida. Sus restos serán repatriados próximamente", según informó la agencia DYN.
"Se informa con gran tristeza que hoy a las 2 de Miami -mediodía de la India- el cuerpo de Héctor Rolotti, socio fundador de la cadena de restaurantes Novecento, fue encontrado sin vida en el río Ganges", estableció el parte de prensa.
"El cuerpo se hallaba intacto gracias a las bajas temperaturas del Ganges en esta época del año y fue descubierto por un grupo de lugareños que alertó al equipo de búsqueda que lo rastreaba", agregó.
Familiares del empresario se encuentran en la India, donde se lo buscaba desde hacía varios días.
Qué ocurrió
El lunes pasado, Rolotti "se encontraba junto a su esposa en la ciudad Rajshahí en la zona norte del río Ganges" cuando "en la costa de ese torrentoso río y junto a un grupo de personas ven a una mujer que es absorbida por un remolino".
Ante esa situación, se había indicado en el comunicado difundido por la empresa, "siete personas de ese grupo se arrojan con la intención de socorrerla y logran salir con mucho esfuerzo", aunque "lamentablemente Héctor, que era la última persona en el río, fue también llevado por la corriente".
En el comunicado, entre otros detalles, se había señalado que Héctor era "una persona muy sana, con buena preparación física y con una gran fuerza interior", por lo que toda la familia de Novecento albergaba "aún la esperanza de encontrarlo con vida".
Quién era
Rolotti, quien nació en La Cumbre viajó a Estados Unidos en 1988, y comenzó a trabajar en una agencia de viajes.
Según contó a La Voz, luego vendió películas en video y más tarde con amigos abrieron una heladería con cafetería, hasta que finalmente, en el barrio Soho de Nueva York, inauguraron el primer restaurante Novecento, en honor a la película de Bertolucci.
